Ciudad

FCC pretende legalizar una nave, construida de forma “provisional”, en la planta de los Alhorines

Tras conocer las intenciones de FCC para que el Ayuntamiento calificase los terrenos donde está construyendo la central térmica de los Alhorines como parque industrial, y previa visita a la zona, pudimos observar la construcción de una nave, según consta en el proyecto “provisional”, que nos llamó poderosamente la atención.
Unos días después pusimos en conocimiento del concejal de Urbanismo, Carlos Beltrán, la posible irregularidad de dicha construcción, contestando el responsable de Urbanismo que conocía la existencia de la nave y que los técnicos del ayuntamiento habían levantado expediente en una inspección al respecto, pero que los responsables de la central térmica se habían puesto en contacto con el ayuntamiento para legalizar el edificio, solicitando la licencia oportuna para que, una vez terminada la construcción de la planta, dicha nave se regularice y quede anexa definitivamente al proyecto.

Han pasado unos meses desde entonces, y todo sigue resultando cuando menos extraño en la trama que rodea la construcción de la central térmica, donde, como desvelara EPdV, están en juego casi 10 millones de euros, sin olvidar los 619.000 euros de pérdidas de la piscina cubierta y que FCC ha pedido que se le perdone el pago del canon por el aprovechamiento del agua potable.

Este nuevo capítulo demuestra la impasibilidad de los representantes municipales ante todo lo que tiene relación con esta multinacional, pues todos conocemos algún caso en que se ha multado –como poco– a villeneros por ampliar la casa de campo, no respetar los lindes de caminos, arreglar cualquier desperfecto o añadir elementos a sus casas como una simple marquesina, y rápidamente la inspección ha levantado expediente y los responsables han sido sancionados.

Cuidado con los acuerdos
Lo que en un principio iba a ser una nave provisional para gestionar la construcción de la planta termosolar se ha convertido una construcción firme que quedará perenne junto a la planta. Ahora solamente queda por saber si se le perdonarán las tasas municipales, el ICIO y todos los impuestos con que se graven este tipo de edificaciones. Nos consta que las reuniones entre empresa y ayuntamiento son constantes, dado el interés de FCC, pero visto lo que sucede con piscina, agua y planta termosolar, los responsables municipales deben llevar cuidado con los acuerdos que se tomen o el juzgado será el punto de destino de muchos de dichos acuerdos. Tiempo al tiempo.

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